Vapes Recargables: en qué se diferencian de los desechables
En el mundo del vapeo, hay quienes prefieren usar productos descartables y otras personas que eligen los vapes recargables. Como su nombre lo indica, estos últimos se pueden volver a utilizar una vez que se acaba el líquido de vapeo (se lo conoce como e-líquido).
La diferencia entre ambos es evidente, pero te contamos en más profundidad cómo se componen los dispositivos recargables y en qué se diferencian de los desechables.
Vapes Recargables: cómo se componen
Los vapes recargables son tan populares como los descartables. De hecho, estos fueron los primeros vapos que aparecieron en el mercado.
Están compuestos por dos partes separadas que se integran: una batería y un tanque de líquido, que es lo que se gasta al vapear. Una vez que este líquido se acaba, se puede rellenar e incluso probar distintos gustos y sabores. Del mismo modo, la batería también se renueva, lo que lo hace un producto muy duradero.
Más allá de su principal diferencia con los desechables, los vapes recargables se distinguen según su tamaño, diseño y durabilidad. Por ejemplo, existen distintos tipos como MODs y PODs, que emplean tecnologías similares pero un poco distintas. Las opciones en este caso se multiplican según los que busque el usuario.
Ventajas de los Vapes Recargables
En síntesis, las ventajas que tienen con respecto a los vapes descartables son:
- Duran más tiempo ya que pueden ser recargados muchas veces
- Permiten que el usuario personalice su experiencia de vapeo con distintos gustos y opciones de durabilidad
- Cuentan con partes reemplazables
Aún así, hoy en día los vapes tienen un nivel de innovación tal, que tanto descartables como recargables pueden ofrecer una experiencia única y superadora. Y, ¿lo mejor de todo? En Indy Argentina podés encontrar de los dos tipos.
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